martes, 27 de mayo de 2008

VIDAS TRUNCADAS (de Pen-Ek Ratanaruang)

“¿Por qué quería suicidarme?... No lo sé. No quería suicidarme por las mismas razones por las que otra gente se suicida. Problemas de dinero, desengaños amorosos, decepciones… Tonterías. Muchos libros dicen que la muerte relaja, ¿os lo creéis? Ya no hace falta seguir la última moda, ya no hace falta estar al corriente del resto del mundo. No habrá más e-mails, no habrá más llamadas telefónicas. Será como hacer echarse una siesta antes de despertarte listo y fresco para empezar tu próxima vida. Eso es lo que dicen”

Pues de esta manera poco optimista comienza esta película extraña, intimista y a la vez un poco surrealista.

Presentada en su cartel cinematográfico como “el equivalente tailandés de Lost in Translation” éste es un film que combina perfectamente el ritmo pausado de sus escenas con silencios y música sin sobresaltos.

Su fotografía es de tal calidad artística que muchas de sus escenas parecen postales. No es de extrañar tal belleza cuando su autor es Christopher Doyle y están acompañadas de una manera magistral por una música serena, hermosa y envolvente.

El balance de la primera media hora del film es que hasta este momento sólo es una película estéticamente bonita y elegante. Con ausencia de diálogos, poca acción y mucha observación. Imágenes pausadas, planos cortos… y una gran atmósfera envolvente con pinceladas tristes y decadentes.
La película cuenta la historia de dos solitarios que se encuentran en el mundo. Por un lado, tenemos a un bibliotecario japonés llamado Kenji (Tadanobu Asano), persona muy solitaria y obsesionada con el orden. Me encanta cómo describen este personaje en algún lugar virtual como un personaje en el que “su única diversión consiste en ver pasar sus vacíos días, intentando suicidarse y morir en Bangkok.”. Qué gran frase, resume perfectamente la personalidad de Kenkji.

Por otro lado tenemos a Noi (Sinitta Boonyasak). Noi es lo opuesto de Kenji. Princesa de un océano gobernado por el desorden, el desbarajuste… Noi es la encarnación del caos. Reina de la anarquía y de un mundo creado por ella donde no existe regla o ley alguna que la imponga su forma de vivir. Y encuentra a Kunch… y se queda con su orden

Kenji, perfeccionista y fiel cumplidor de reglas, normas y pautas de conducta, encuentra a Noi... y se enamora de su desorden y caos existencial.

La vida de estos dos solitarios experimenta un giro radical cuando se conocen de manera accidental por la sucesión de un hecho (que por supuesto no piense desvelaros cuál) pero que sí os adelanto que es un hecho que está dotado de escasa dosis de romanticismo pero que sin embargo sirve para que cupido realice su trabajo y consiga unir a dos almas que andaban sin rumbo alguno por el mundo.

“La lagartija se despierta y se da cuenta que ella es la única lagartija que queda con vida. Su familia y sus amigos han muerto. Todos han desparecido. Los que no le gustaban, los que le incordiaban en la escuela… Todos han desaparecido. La única lagartija está completamente sola. Echa de menos a su familia y a sus amigos. Incluso a sus enemigos. Es mejor estar con sus enemigos que estar sólo. Eso es lo que pensó. Mirando la última puesta de sol, la última lagartija piensa: ¿Qué sentido tiene vivir si no tienes a otra lagartija con la que poder hablar?... Pero incluso ese pensamiento no significa nada cuando… eres la última que queda”

Como suele decirse, Dios aprieta pero no ahoga, y estas almas errantes que merodeaban por el universo erramte... estaban al límite del fin de su existencia. Ya no veían luz ni salida alguna. Y este hecho servirá para que ambos encuentren de nuevo la luz que vuelva a iluminar sus apagadas y decaídas existencias.

Kenji y Noi, Noi y Kenji son el orden y el caos, el caos y el orden. La perfección y el desorden. Blanco y negro. Negro y blanco. La luz y la oscuridad. Lo tenebroso y la centella.

Así de caprichoso e inexplicable es a veces el amor. Dos personalidades y caracteres totalmente contrarios y opuestos (+ -) que sien embargo, se atraen... y se complementan.

Tailandia y Japón en pura sintonía… A pesar de hablar dos lenguas diferentes, les bastan sus miradas y acciones para comunicarse... bajo la sombra del inglés.

"Esto es bonito"

"Sí… Estás triste?

"Todo el mundo está triste"


La película en líneas generales está bien. Es original y bonita. Quizás en ciertos momentos puede dar la sensación de ser algo lenta. No obstante éste no es un cine dirigido para grandes públicos. “Un romance inusual, turbulento y apenas tópico que se desarrolla con el calmado transcurrir de sus escenas poéticas, que se juntan levemente para componer una historia austera, sincera, no efectista, original, extraña. Será especialmente apreciada por todos aquellos que encuentren en ella experiencias y emociones conocidas, aunque en un ambiente y situaciones exóticamente fuera de lo ordinario… Abstenerse detractores de la no-acción y amantes de la racionalidad omnipresente” dice una de las críticas que me he encontrado por el espacio virtual.

La película, dirigida por Pen-Ek Ratanaruang con ritmo lento y pausado en su inicio, va ganando y adquiriendo fuerza a medida que va avanzando su trama nostálgica. En el fondo, estamos ante un drama trágico-romántico con toques de pesimismo y decadencia.

La película, obtuvo muy buenas críticas internacionales cuando se estrenó, allá por el año 2003. He escogido las dos siguientes:

The New York Times "Un relato de ambiente nostálgico cuyo tono contemplativo estalla a ratos con irrupciones de violencia. (...) Puede parecer frustrantemente evasiva a ratos, pero es una película que merece la pena y que se disfruta contemplándola"

Variety "La película despliega una personalidad distintiva, un peculiar sentido del humor y un elegante estilo visual"

Aunque también me he encontrado con alguna crítica con menos pasión hacia el film... :

Filmaffinity “Tras unos primeros cinco minutos magistrales, Pen-Ek Ratanaruang, me da en las narices con una historia inconexa, extraña y difícil de digerir. Toca temas de esos que tildamos en llamar universales como la soledad, el significado de la vida o la muerte. Y lo hace desde el prisma en el que los silencios hablan y las balas hacen callar”

Lo cierto, es que Vidas Truncadas contiene escenas metafóricamente muy bellas como es la que tiene lugar cuando Noi ordena su casa… En ella, todos los objetos sobrevuelan sobre su cabeza cual planetas fueran, a una velocidad calmada, a un ritmo relantizado… Los objetos quedan suspendidos en el Universo de Noi.

Ésta y otras escenas recuerdan en cierto modo (guardando las distancias, por supuesto) a Lost in Translation, como es en la que Noi y Kunch salen por la noche a divertirse. De fondo, una música intimista... muy al estilo "Lost".

¿Por qué se la compara con Lost in Translation? Pues en mi opinión porque este drama romántico, coproducido entre Tailandia y Japón, está protagonizada por dos personajes solitarios que se encuentran, como así ocurría en la película magistral (más bien obra maestra) dirigida por la gran Sofía Coppola.

"¿Volveremos a vernos?"

"... sí"

"¿Cuando?"

"… algún día"

Y vosotros… ¿os vais a atrever a verla algún día?

miércoles, 21 de mayo de 2008

LA DAMA DE PORTO PIM (de Toni Salgot)

“La historia que voy a contarles fue la que marcó para siempre mi destino. Ocurrió hace mucho tiempo, aquí mismo, en Porto Pim. Un pueblecito de una pequeña isla del Archipiélago de las Azores, situado en mitad del Océano Atlántico. Intentaré contárselo tal y como lo recuerdo aunque… ya no se donde está la verdad…”

Como gran admirador que he sido desde siempre de Emma Suárez, soy consciente de que para ser la primera película que comento de Emma en este blog… no ha sido una buena elección haber escogido La Dama de Porto Pim.

No es ésta precisamente una película donde Emma destaque por su gran labor interpretativa. Su papel que tiene en esta película no hace justicia a su gran talento indiscutible que ha demostrado poseer con creces a lo largo de su ya dilatada carrera cinematográfica. Su papel de Lucía en este film no la permite desarrollar todo su potencial interpretativo ni exhibir todas sus enseñanzas que ha ido acumulando desde que con tan sólo 13 años de edad debutara en el cine con la película Las Memorias de Leticia Valle.

La Dama de Porto Pim, basada en la novela del mismo título escrita por el italiano Antonio Tabucchi, es una película llena de buenas intenciones pero la falla el guión y la fuerza interpretativa de sus personajes… Bueno, más en concreto, la falla la fuerza interpretativa de uno de sus actores principales, el de Sergio Peris-Mencheta.

“A ella la vi por primera vez aquel domingo en el puerto. Parecía sacada de un cuadro, no de uno de aquellos barcos cargados de gente sucia y sudada que huía a las Américas”

Y es que el personaje de Emma Suárez está muy vinculado y relacionado con el de Sergio y claro con esto… os digo todo. Sergio Peris-Mencheta es un actor que no está a la altura interpretativa ni al nivel de exigencia que implicaba formar parte del reparto de esta película. Él es el único que falla de todo el gran elenco de actores que integran el contingente interpretativo de este film. Yo hacía tiempo que no veía una actuación tan mediocre y con registros interpretativos de tan de escasa calidad.

Sergio Peris-Mencheta es un actor curtido en la televisión, en series juveniles que en muchas ocasiones suponen una buena escuela de aprendizaje y que ayudan dar el salto a la pantalla grande, como fue el caso de Pilar López de Ayala. Pero Sergio no ha sabido superar sus marcados registros televisivos y no ha sabido adaptarse a las exigencias de credibilidad interpretativa que requiere la magia del cine.

No se qué se le pasaría por la cabeza al Director del film, Toni Salgot, para darle a Sergio Peris-Mencheta el papel del personaje con más peso en película y en cambio no haberle relegado a un personaje mucho más secundario, como por ejemplo, el de un pescador más. (Vamos, yo sólo le hubiera sacado de extra en un plano de lejos pescando y poco más).

¿Qué es lo que salva la película y a la interpretación de Emma Suárez?... Pues sin lugar a dudas el resto de interpretaciones pero sobre todo la de una de ellas, la de Antonio Resines, que está soberbio en todas sus intervenciones. Da vida al personaje de "el Español”, un tabernero sencillo, pausado, y lleno de humildad. Aunque tenga un personaje con oficio de tabernero, no es un Diego Serrano (que es un personaje genial y que Antonio lo borda en mi serie favorita), sino que es un personaje que esconde honestidad y sencillez.

Por lo demás, como os cuento, La Dama de Porto Pim tiene buenas intenciones y contiene los ingredientes suficientes para ser una buena película. De ella me gusta...

… su música y su fotografía de paisajes marítimos (en las Islas Azores),

… su ambientación de la época (en 1944, al filo de la Segunda Guerra Mundial)

… la seducción y misterio que desprende el personaje de Emma Suárez en algunas de sus escenas

… las deliciosas conversaciones que mantienen los personajes de Antonio Resines y de Emma Suárez en algunas de sus escenas juntos

… las reuniones de la gente del pueblo en la taberna de "el Español” (Antonio Resines) para escuchar el noticiario de la radio

Y… no quiero ser repetitivo, pero todos estos componentes que me gustan de la película no son suficientes para contrarrestar la interpretación pésima y sobreactuada de Sergio Peris-Mencheta. Y es que el problema radica en que su personaje de Lucas está vinculado directa o indirectamente con el de casi todos los otros personajes que aparecen en película y claro, como es lógico, esto se refleja en el resultado final de la película. Su actuación hace que la película pierde fuerza y que sufrague en el profundo mar marinero.

Como prueba de su mala actuación, hay una escena en la que su personaje de Lucas aparece abrazado a Lucía (Emma Suárez), los dos acostados en la cama… y Sergio pone una cara de tontorrón-inocentón-bobalicón que no tiene explicación alguna.

Y claro, como en la vida todo se contagia menos la riqueza y la hermosura, en las escenas en las que comparte cámara con Emma (que son unas cuantas), Emma no puede esta a la altura interpretativa que le exige el personaje de la novela de Tabucchi. No es éste el mejor papel de su carrera cinematográfica, eso está claro.

“Las cosas no son tan fáciles, no sabes quién soy, no me conoces… Lucas no es tan sencillo. La vida… la vida no es como tú la ves…”

En esta relación angustiosa y atormentada que hay entre Lucía (Emma Suárez) y Lucas (Sergio Peris-Mencheta) no hay química, ni feeling... ni nada. Como muestra, un botón…En uno de sus numerosos reencuentros que tienen, surge una escena donde brota de ellos esta converación carente toda sensibilidad y magia posible

“Espera… Lucas, te he echado mucho de menos”

“Yo también”


Como podéis ver, es tal el derroche poético de palabras románticas entre ambos personajes, que tienen la misma pasión y sensibilidad que puede tener un pedrusco en medio de un desierto. En fin, es lo que hay.

Lo mejor sin duda de la película es la relación de amistad que hay entre los personajes de Antonio Resines ("el Español") y de Emma Suárez (Lucía). Es una amistad nacida desde el respeto, la empatía y la compresión. Dos personalidades solitarias que se comprenden y escuchan en una pequeña isla de pescadores llamada Porto Pim, isla donde ambos han encontrado su lugar en el mundo. La suya, es una relación sincera y confesional que no tiene ni busca más pretensiones.

Tras unas primeras intervenciones más bien mediocres de Emma compartiendo protagonismo con Sergio, con el paso de los minutos, Emma consigue alcanzar el aprobado en su interpretación gracias a un par de escenas que comparte con Antonio Resines, que la salva del naufragio interpretativo.

La primera de estas escenas acontece durante una conversación que tiene lugar en una furgoneta donde Emma comienza a darle pistas sobre su oscuro y complicado pasado. Pero sobre todo, la mejor escena vendrá después, en la taberna de "el Español" donde ambos, sentados uno frente al otro y Emma degustando un buen coñac, brota una conversación placentera, sincera y elocuente que nos devuelve al espectador una ligera esperanza de “recuperar” el interés por la película.

“¿Saben lo que es la traición?...La traición, la de verdad, es cuando sientes vergüenza y desearías ser otro. Ahora, cuando recuerdo todo, se que no pude escoger. Aunque por lo que se, en el amor nunca podemos escoger…”

No se, decidid vosotros si os apetece verla o no (yo reconozco que lo hice sin dudar porque salía Emma Suárez). Si os sirve de ayuda para decidiros mejor, os paso algunascríticas que encontré virtualmente:

"… Hay buenas, incluso generosas, intenciones en el planteamiento (...) pero lo que la pantalla encuentra es menos convincente de lo que es fácil intuir que el guión promete. La credibilidad del relato como conjunto no cuaja y hace de este buen melodramón un filme bien intencionado pero innecesario, nacido muerto, exangüe"

“…Es en el guión de Salgot y Jacobo López-Vilasaló donde la película hace aguas. La historia avanza de forma irregular, y combina situaciones muy manidas y previsibles, con otras ciertamente inverosímiles, como las que rodean el final de la película.”

“…El enganche sexual que sufre Lucas por Lucía es mostrado explícitamente, sin recurrir a elipsis, y a pesar de ese intento ingenuo de dar pasión al film, este resulta muy frío y distante para el espectador, que nunca llega a sentirse implicado en la historia.”

Yo por mi parte sí os la recomiendo ver aunque sólo sea para disfrutar de la magnífica interpretación de Antonio Resines, pero si tenéis otras en lista de espera, ésta puede esperar. Sin más.

jueves, 15 de mayo de 2008

ÚLTIMA LLAMADA (de Joel Schumacher)

Hay casi 8 millones de habitantes en los 5 distritos de New York y 12 millones en el área metropolitana. Hay unos 10 millones de líneas telefónicas, más de 50 compañías, 3 millones de neoyorquinos utilizan móviles.

Antes ver a alguien sólo era un síntoma de demencia, ahora, define la categoría social. Y el uso de tarjetas está sustituyendo al de monedas. Aunque, a pesar que cada vez se utilicen más lo móviles, unos 4 millones y medio de residentes y 2 millones de visitantes siguen utilizando teléfonos públicos con regularidad.

Esta es la cabina de la 53 con la octava, puede ser que sea e último vestigio de intimidad en el west side de Manhattan. Es la última cabina de este tipo y aún sigue funcionando, desde aquí se realizan hasta 300 llamadas diarias. Esta cabina ha sufrido 41 robos en los últimos 6 meses. La compañía Verizon tiene previsto desmontarla y sustituirla por un kiosco mañana a las 8.

A tan sólo 2 manzanas, se encuentra el hombre que será el último ocupante… de esta cabina.


¿Interesante, no?... pues así de prometedor es el comienzo de esta película repleta de suspense, emoción y buena acción.

Película breve en duración (tan sólo 82 minutos) pero de intensa angustia en los que su Director, Joel Schumacher, ha sabido dar un ritmo frenético y trepidante a una historia bien sencilla de contar: Stu Shepard (Colin Farrell) un publicista ambicioso de NY es amenazado telefónicamente por un francotirador que le tiene totalmente acorralado y controlado en todos sus movimientos físicos y… también los que no son tan físicos o corporales. Como dice un comentario muy acertado del periodista Hunter, del Washington Post "Phone Booth (nombre original de la película) tiene una duración de 82 minutos neoyorquinos, todos ellos excitantes"

Cierto es que me ha costado bastante en decidirme a ver esta película, estrenada en el año 2003, porque, si os soy sincero, no me atraía lo más mínimo ni su historia ni su actor protagonista, Colin Farell.

De Colin, aún después de reconocer su más que aceptable interpretación en este film, sigo pensando que es un actor que no me acaba de convencer en absoluto y que su carrera cinematográfica está llena de continuos alti-bajos. Tiene actuaciones insustanciales y carentes de talento como son las que tuvo en Alejandro Magno, Daredevil o en La Prueba junto al mismísimo Al Pacino. Aunque también es cierto que cuenta con otras de aceptable calidad, como fue el personaje lleno de carácter y aplomo que interpretó en Minority Report.

Innegable es que su actuación en Última Llamada es correcta y creíble. Está convincente en su papel de asesor publicitario arrogante y ambicioso que utiliza la mentira y el engaño como armas de supervivencia en una jungla empresarial tan competitiva como es la ciudad de NY.

De la calidad de su interpretación dependía casi la totalidad de la credibilidad de la película. Colin tenía la responsabilidad de que sus registros interpretativos fueran lo suficientemente verídicos y naturales para que la película consiguiera tener la carga de tensión que exigía el guión. Si sus registros no hubieran sido convincentes, esta película no tendría el suspense ni la intriga de la que está dotada.

Ni siquiera el gran potencial de actores secundarios con los que cuenta el film hubiera sido suficiente para hacer creíble la historia si la interpretación de Collin hubiera sido mediocre y carente de fuerza. El director arriesgó dando todo el peso interpretativo de la película a Collin, aunque como os digo, éste “salva los muebles” de una manera bastante digna. Arriesgada decisión pero superada con nota.

Como dice el propio Joel Schumacher “son tantos los personajes secundarios que aparecen a lo largo del film que más bien parece una película coral por la gran cantidad de personajes que hay con pequeños papeles: el jefe de policía, el pizzero, las prostitutas, ...”. Pero como os digo, todo este conjunto de grandes actores con pequeños papeles no hubieran salvado la película si la interpretación de Colen no hubiese estado a la altura de las circunstancias y de las expectativas creadas.

Además de Stu Shepard (Colin Farrell), personaje principal de esta trama trepidante de acción, el film cuenta con un segundo personaje de peso, casi principal… pero que curiosamente sólo está presente mediante su voz. Nunca aparece físicamente en la pantalla (excepto un minuto en la última escena), su presencia es sólo sonora. Me estoy refiriendo al francotirador invisible interpretado por Kiefer Sutherland, que una vez más, recomiendo disfrutar de su impresionante voz en su versión original ya que Sutherland logra entonar su potente voz grave y profunda de tal manera que consigue intimidar al propio espectador con su ingenio e ironía… y con sus incómodas carcajadas.

Estas dos interpretaciones principales están apoyadas y complementarias por otras secundarias de talento, como es la de Forest Whitaker (El capitán Ramey), la de Radha Mitchell (Nelly, la mujer de Stu) o la de la mismísima Katie Holmes (Pamela, clienta y algo más para Stu)... Todos estos personajes, unidos por el pleno desconcierto y por la situación incierta del momento. Todos están involucrados, todos están relacionados, todos están inmersos en esta pesadilla. Todo están… en el punto de mira.

La película está bien, entretenida, sin más. Al menos su guión está curioso, es original y novedoso (guardando las distancias con la película-corto de Mercero) y sobre todo es innovadora en la forma visual trepidante que tiene en la forma de narrarnos los hechos que en ella acontecen.

Y es entretenida porque desde el minuto 1 comienza a tener su acción un ritmo palpitante con escenas y situaciones muy dinámicas y entretenidas para el espectador. Su Director, Joel Schumacher, sabe perfectamente transmitir ritmo y emoción a sus películas como ya lo demostró en películas como en Línea mortal, Un día de furia o en Asesinato en 8mm.

Ésta es también la típica película que provoca opiniones bien distintas y opuestas… Habrá quien la valorará como “bastante buena”, otros como “entretenida” o “pasable” y otros como “vacía, fantasma y absurda”. Como prueba, podéis ver dos críticas que he encontrado en dos webs dedicadas al cine, con opiniones bastante diferentes:

La Butaca: “Una obra ágil, amena, breve e intrigante, un filme con apariencia de producto televisivo que finalmente parece haber sido reciclado para la pantalla grande. En cuanto al reparto, resalta la sorprendente corrección del habitualmente sobreactuado Colin Farell”

Filmaffinity: “La historia de partida es trepidante, entretenida y original... pero el resto de la película es como todos sus personajes de fuera de la cabina: un par de retazos vacíos, sin profundidad, sin ninguna implicación por parte del espectador (por mí, como si liquidaba a novias, polis y transeúntes varios). Y cuando uno pide más información que alimente su interés, va la cosa y se acaba. Resumiendo, lo único bueno de "Phone Booth" estaba dentro de la cabina: algunos diálogos, un estupendo Farrell y la impresionante voz de Sutherland en versión original”

Como pequeña curiosidad de la película, la que nos comenta Roger Ebert, del Chicago Sun-Times, sobre el guionista de la película "La película es esencialmente una obra con moraleja, y no es un sorpresa que Larry Cohen, el guionista, tuviera esta idea hace 20 años... cuando todavía había cabinas telefónicas y obras con moraleja"

¿Lo peor de la peli?... pues, como ocurre en muchas de las películas americanas, que en su trasfondo suele haber siempre una lección de moralidad para los espectadores, pues ésta película no iba a ser menos. Y es que esencialmente lo que nos cuenta esta película no es más que la historia de un justiciero (vestido de francotirador) que va imponiendo “su justicia” por las calles de la ciudad de los rascacielos. Vamos, una especie de Dios que quiere conseguir un mundo ideal donde la gente obre sin engaños, sin malos actos y sin infidelidades. Que perdure en ellas la sinceridad, la nobleza… pero claro, a su manera. Es decir, el mundo de Yupi.

Pero bueno, lo importante es que esto es sólo cine, es ficción… a si que, ¿os apetece evadiros durante poco menos de hora y media del stress y de la rutina diaria?, pues con Última Llamada lo conseguiréis. Es puro entretenimiento.

jueves, 8 de mayo de 2008

YO SOY LA JUANI (de Bigas Luna)

Lucha niña guapa, hazlo niña buena, huye de este ruido por la carretera,
sigue a las estrellas, vive porque brillas, hazlo con constancia y nunca te rindas


Bigas Luna ha realizado una película fresca, actual y juvenil. Ha creado una nueva versión de Jamón, Jamón pero adaptada a los nuevos tiempos. Aquella olía a ajo, a cebolla y a tortilla de patatas. En cambio, Yo soy la Juani desprende un aroma más a discoteca, desodorante y... a gasolina de coches deportivos y tunneados.

Qué hermosas las calles por las que caminas, todas las esquinas de ti se enamoran,
te guiñan el ojo hasta las palomas y el sol sale antes sólo para amarte.

Para encontrar a su Juani, Bigas Luna buscó en el casting a una nueva Silvia (personaje de Penélope Cruz en Jamón Jamón) pero adaptada a las nuevas corrientes y tendencias, una Silvia del siglo XXI. Juani, en lugar de ser una “jamona” (como así la llamaba el personaje de Javier Bardem al de Penélope Cruz), ahora es una cajera del Media Markt.

(Más) dulce que el sueño, intensa que el café, como la mañana, clara es tu mirada,
tu aroma es la envidia de todas las flores,
y en tu pelo brillan todos los colores:blanco, rojo, verde, amarillo.

Bigas ha encontrado a una nueva actriz de talento, como ya lo hizo en su día con Penélope Cruz… Ha descubierto a Verónica Echegui. Verónica no es Verónica Echegui sino que es... la Juani!, sin más, es un papel que la estaba esperando, diseñado para ella… Fue todo un acierto elegir a esta actriz para dar vida al personaje de la Juani. Su interpretación está llena de naturalidad, frescura, vitalidad y sobre todo, está repleta de carácter… Es la Juani!

Hoy están de fiesta todos en el barrio,
la niña morena está paseando y mira pa'lante como las valientes,
suenan campanas, laten corazones, cruje el cemento, luce el cristal,
la fuerza del puño brilla en tus ojos,
partes de cero, vas hacia el cielo.

Bigas ha descubierto a la Natalie Portman del cine español... ¿o no os habéis percatado de su gran parecido con ella?... Lo curioso es que en otras escenas también se parece a Mónica Cruz (hermana de Penélope) y en ocasiones su timbre de voz… también recuerda al de la mismísima Penélope.

Los hombres se giran, los jovenes silban,l os viejos sonríen, desde las terrazas,
los niños te agarran por la falda y gritan:"¡Juani la más guapa, es la más bonita!"
El aire se aparta ante tu fragancia y las nubes cantan esta melodía,
suenan los tambores y todos los móviles pierden cobertura… por la criatura.

En su primera mitad, la película está totalmente impregnada de juventud, de fiesta, de ocio, de ganas de pasarlo bien... de vida. Conversaciones nada profundas, propias de chavales que acaban de abandonar la adolescencia y que caminan hacia la madurez.
Conversaciones sobre bafles, decibelios, tunning, operaciones de pechos, tatuajes... Fiesta, música disco... Sexo, carreras de coche, videojuegos...

La película habla de un sector de jóvenes que viven al día, al límite, sin esperar al mañana. Jóvenes que en ocasiones confunden la realidad con los videojuegos pero a la vez jóvenes que trabajan para poderse costear sus vicios y aficiones sin depender económicamente de sus padres.

Lucha niña guapa, hazlo niña buena, huye de este ruido por la carretera
Lucha niña guapa, hazlo niña buena, huye de este ruido por la carretera.

Jóvenes en los que su mundo no todo es de color de rosa (como el cartel de la película) sino que tienen también sus historias, sus quebraderos de cabeza… Problemas personales, familiares, desengaños amorosos…

La película avanza y no dejan de pasar cosas, en ningún momento pierde ritmo ni emoción. Mantiene continuamente su interés e intensidad narrativa... Y siempre acompañada de buena música, de canciones que se adapta perfectamente al ritmo frenético de las escenas. La Mala Rodríguez, Hanna, Haze, Facto Delafe y Las Flores Azules... Muy buena toda su banda sonora.

Dale gas Juani ... ya le doy
Dale gas Juani ... ya le doy
Dale gas Juani ... ya le doy
Dale gas ... ya le doy.

"… No puedo más, tía, Vane. No puedo más del curro, de mi viejo,de la mierda ésta, ¡del puto Jonah!... ¿sabes que te digo?... … Que a la mierda todos. A la mierda el Jonah, a la mierda mi viejo, a la mierda el Media Markt... Y a la mierda todos, tía…"

Esta conversación entre la Juani (Verónica Echegui) y la Vane (Laya Martí), es clave para el transcurso de la película. El mundo de la Juani y de la Vane se les vuelve en contra, la vida no se ha portado con ellas como se merecen. Mal de amores, pésima suerte, problemas familiares... La única salida es dejar su mundo e ir en búsqueda de otro nuevo, otra vida… Romper con todo, empezar de cero… Y esa nueva vida… se encuentra en Madrid. La película da un vuelco de 180 grados....

Una de las escenas que más me gustó de Yo soy la Juani es la llegada de las dos amigas (Juani y la Vane) a Madrid. Pletóricas de ilusión y fuerza, con ganas de comerse el mundo... No hay impedimento ni barrera alguna que se las ponga por delante. Nada ni nadie las puede frenar. Su ilusión puede con todo.

Tu ombligo siempre al aire, cómo retiras el pelo de tu cara y lo guardas tras la oreja,
cómo te lames los labios despúes de sorber el café con leche,
cómo te endureces cuando sientes miedo,
tu sonrisa pícara cuando te manchas de ketchup,
… tus sueños

Juani y la Vane salen por Madrid y aprovechan todo lo que les ofrece la gran ciudad (tienda de tatuajes, de piercings, tiendas de marca de ropa, joyerías, tiendas de música....)... Disfrutan, ríen, gastan... Son dos locas apasionadas e ilusionadas recién llegadas a la capital.

“Esta noche vamos a comernos Madrid”

Pero como os he adelantado, en esta nueva etapa madrileña, la película cambia de registro y se vuelve más realista, más dura. Hay menos diversión, más esfuerzo, más sufrimiento...

Las dos amigas se ven obligadas a buscarse la vida para conseguir sus metas y la vida les empieza a enseñar sus dientes. En Madrid comienzan a conocer el lado oscuro de la vida y lo complicado que es perseguir (y conseguir) los propios sueños. Pero cuando Juani está a punto de tocar fondo, saca fuerzas de lo más profundo… y resurge de sus propias cenizas. Tira pa'lante. Siempre. Nunca se rinde. Es una luchadora. Es la Juani. Nada y nadie puede con su fuerza, juventud y vitalidad, porque ella... ella es la Juani!

La niña de los ojos del extrarradio,
la niña que aspira, la superviviente,
la que mira pa'lante y no se arrepiente

Finalizando la película, hay una escena en la que Juani está andando en un descampado junto al coche de su antiguo amor, el Jonah (Dani Martín) y ésta es una escena que me recuerda (y mucho) a los andares que tenía el personaje de Penélope Cruz en Jamón Jamón sobre aquellos escenarios áridos de la sierra aragonesa de Los Monegros.

Dale gas Juani ... ya le doy
Dale gas Juani ... ya le doy
Dale gas Juani ... ya le doy
Dale gas ... ya le doy.

Bigas Luna una vez más nos vuelve a demostrar que sabe lo que es adaptarse a los nuevos tiempos y estar al día de las nuevas corrientes y tendencias... Refleja perfectamente los nuevos hábitos de los jóvenes, las nuevas modas, los nuevos medios de comunicación tecnológicos... Lenguaje sms en diversas escenas (que además facilitan el seguimiento de la propia película), inserción de la dirección web de la propia película a modo publicidad (en la última escena de la película) ... Incluso este lenguaje actual, cercano y muy “de los jóvenes” se utilizó en el marketing promocional de la propia película, como por ejemplo, la expresión “Juani es LA +” que aparece en su propio cartel cinematográfico.

Como ya os habréis percatado, los fragmentos descriptivos que he utilizado como apoyo para transmitir con una mayor esencia “de Juani” esta entrada de mi blog, pertenecen a la letra de la canción La Juani del grupo Facto Delafé y Las Flores Azules, que está incluida en propia banda sonora de la película.

Una de las cosas que tengo que agradecer a la película Yo Soy la Juani es que gracias a ella he descubierto a este grupo catalán llamado Facto Delafé y Las Flores Azules. Es el grupo más fresco y original que he escuchado por lo menos en los últimos años. Ahora están cogiendo más fama por motivos publicitarios, pero yo les descubrí viendo Yo soy la Juani. Participan en la banda sonora con una segunda canción titulada Pasan las luces. Aquí podréis oír la canción La Juani, aquí podéis ver su video… Y finalmente, como regalo, una interpretación de la canción La Juani en directo.

Yo soy la Juani es una película fresca, moderna y actual. Creo que es una buena película para ver y pasar un rato entretenido, pero tampoco me hagáis mucho caso, que yo sigo hipnotizado bajo los efectos mágicos y surrealistas de los mundos cinéfilos creados por Bigas, sobre todo desde que visioné Son de mar ... y quizás no soy muy objetivo.

"Vane, no puedo más. La vida no es de color de rosa. Estoy creciendo. Busco algo, y te juro que lo voy a conseguir. Me dejaré la piel. Voy a ser actriz. Dejaré de ser una niña, pero seguiré siendo Juani"

Juani Jurado, La Juani lucha por su sueño, vosotros os habéis rendido… ¿o seguís luchando por lograr vuestros sueños?

lunes, 5 de mayo de 2008

KAMCHATKA (de Marcelo Piñeyro)

Otoño de 1976, días después del golpe militar.

Si hay que buscar un calificativo para definir con una sola palabra este film, escojo la palabra “bella”. Así es, estamos ante una película muy bella y bonita, de las que no hay que dejar de ver. Yo os aviso, luego cada cual…

Es una historia contada con mucha ternura y sensibilidad sobre los momentos difíciles y de angustia que atraviesa una familia argentina en tiempos de la dictadura militar.

"Al principio había una célula y nada más. Esa célula se dividió en dos, y esas dos en otras, y así. De alguna células salieron los vegetales, de otras lo bichos, de otras los animales… y de otras nosotros. Lo que nunca explican es lo que pasa después… entre el momento en que las células se convierten en una persona… y el momento en que esa persona sube al Himalaya, inventa una vacuna o se vuelve un escapista famoso como Houdini. Eso sí que es un misterio. Ningún manual habla de esas cosas. Ningún maestro. Pero mi papá sí me habló. Una vez. La última vez que lo vi"

De todas formas tiene poco mérito catalogarla así porque contando con actores protagonistas de la talla de Ricardo Darín y Cecilia Roth, ¿cómo puede ser mala una película?... muy difícil. Estos actores derraman talento por sus poros. Incluso aunque hubiera un guión malo, seguro que actores de este calibre salvarían igualmente la película. Aunque no es el caso de Kamchatka, ya que tiene la suerte de tener con un gran guión. Es una buena historia la que se nos cuenta.

Kamchatka es una película narrada desde la inocencia y la curiosidad observada por los ojos de un niño de tan sólo diez años de edad llamado Harry (Matías Del Pozo). Junto a sus padres (Ricardo Darín y Cecilia Roth), y su hermano pequeño, el Enano (Milton De La Canal), se ven obligados a huir de su propia casa… y adoptan un rol de adultos muy admirable.

Estos dos niños tienen que convivir con una situación extraña y ajena a ellos… Argentina ha caído en manos de una dictadura militar y muchos de sus ciudadanos son perseguidos y secuestrados. Esto es lo que les ocurre a la familia de Harry, son buscados y se ven en la obligación de huir de su propio hogar y esconderse de esa represión militar. ¿Y qué culpa tienen ellos de esta situación que les afecta de lleno?... pues ninguna, pero lo cierto es que se adaptan a la situación del momento con una madurez y un sentido de la responsabilidad digna de reconocimiento.

"Mi historia, empieza con una célula, como todas… pero termina en Kamchatka"

A pesar de la dureza y crueldad de la situación, sus padres (Ricardo Darín y Cecilia Roth) hacen todo lo posible para suavizar la dura realidad de la situación. Consiguen mediante artimañas infantiles hacer más llevadera la situación difícil por la que atraviesan, incluso en ocasiones aprovechan esta dura coyuntura para convertirla en lúdica, en diversión... en un juego de niños.

Es una familia que nunca pierde la ilusión ni la fuerza de tirar para adelante, resisten, aunque las circunstancias sean cada vez más adversas y difíciles. El sentimiento de unión siempre estará presente en ellos.

“Son tus perfumenes mujer los que me sulibellan…”

(Bonita escena ésta… toda la familia unida bailando en el salón)

Aunque se ven obligados a abandonar su obligar y esconderse en una finca a las afueras de su ciudad, sin embargo no perderán la fuerza ni el ánimo para educar correctamente a sus hijos. Ni perderán nunca la alegría de disfrutar de la compañía de su hijos ni renunciarán jamás a sonreír. La felicidad de sus hijos está muy por encima de cualquier dictadura militar.

… los que me sulibellan… son tus perfumenes mujer

Este film es un homenaje a la institución de la familia, un reconocimiento a las madres que dan todo por sus hijos y a los padres que se desviven por educar correctamente a sus hijos.

Igualmente de elogiable es la relación de protección y afecto mutuo que se da entre los dos hermanos. El mayor, Harry, adoptará un papel paternal sobre su hermano pequeño, el Enano.

La película, dirigida por Marcelo Piñeyro, está contada desde la ternura y la sensibilidad. Si a ello añadimos que es un film que posee una fotografía preciosa y un guión muy bien estructurado… la convierte en lo que os digo, una película muy recomendable de ver.

“Las estrellas fugaces son piedras que entran en convulsión al tomar contacto con la atmósfera. En esto, mamá tenía razón. Por algún motivo, las estrellas fugaces tienen una relación directa con los deseos. En esto, papá tenía razón. Yo miré y miré hasta que me dolieron los ojos, pero no vi nada. Debe ser por eso por lo que mi deseo no se cumplió”

Igualmente la película resalta valores tan importantes como es el de la amistad. El niño protagonista, Harry, hace lo imposible para poder volver a ver a su mejor amigo de la escuela, Bertucco (Nicolás Cantafio) y a su vez, adquiere unos lazos afectivos muy fuertes con otro muchacho mayor que él, Lucas (Tomás Fonzi), amigo de sus padres, del que irá descubriendo y aprendiendo de él misterios de la vida.

“El libro de Houdini cuenta muchas cosas. Dónde nació, quiénes eran sus padres, cómo se hizo famoso, cuáles fueron sus pruebas más difíciles. Lo único que no cuenta… es cómo hacía para escapar”

Kamchatka también contiene momentos dignos para tomar ejemplo, como es el reencuentro de un padre (Héctor Alterio) con su hijo (Ricardo Darín)… El saber perdonar y dar una segunda oportunidad a las personas.

Bueno, y llegado a este punto… ¿sabéis lo que es Kamchatka?... ¿una técnica de relajación?... ¿un país?... Quizás os saque de dudas lo que nos cuenta Harry, en la última escena de la película cuando nos narra lo último que le dijo su padre susurrando a su oído:

“La última vez que lo vi… mi papá me habló de Kamchatka. Y esa vez lo entendí. Y cada vez que jugué, papá estaba conmigo… y cuando el partido vino malo, me quedé con él y sobreviví. Porque Kamchatka es el lugar donde resistir”

Y si no os ha quedado bien claro, Cecilia Roth, en una entrevista, lo explicaba así de claro:

“Ni irse ni quedarse, resistir… y creo que Kamchatka es eso, es el lugar de resistencia, el lugar donde uno puede resistir

El guionista, Marcelo Figueras, cuenta en los extras del dvd de la película, que escribió el personaje de la madre pensando desde el inicio en Cecilia Roth. Que ese personaje sólo podía hacerlo Cecilia. En cambio, para el papel del padre no lo tenía tan claro, pero que cuando el Director, Marcelo Piñeyro, le comunicó que lo interpretaría Ricardo Darín pensó al instante “claro, es la elección más coherente”

No dejéis de verla. Esto es cine, del bueno. Yo os aviso, luego cada cual…